Importante caída en la confianza de servicios básicos y alza en los grupos corporativos

A pesar de que la investigación no alcanzó a medir los recientes errores de cálculo en las cuentas de la luz, la categoría de servicios básicos es la que experimenta la caída más significativa en el último año en Chile.

La confianza nace y muere en la experiencia, en las vivencias cotidianas que las personas tienen con marcas e instituciones a lo largo de su vida.

En Chile, esta experiencia ha sido mala en el último año para los usuarios de servicios básicos. En efecto, a pesar de que los errores de cálculo en las cuentas de la luz no alcanzó a ser medido, todas las marcas de la categoría (que suma electricidad, agua y gas), y no sólo las asociadas a la electricidad, disminuyen su confianza, viviendo directamente el impacto del malestar general por el aumento de las tarifas, indica el estudio ICREO 2025 de la consultora Almabrands.

Comparando 2025 vs 2024, servicios básicos registró una caída de 23 puntos netos en la confianza percibida por las personas. “Se trata de la categoría más relevante en la vida de las personas, pero frente a la cual se sienten más perjudicadas que beneficiadas”, dice Pamela Ordenes, socia y líder de la práctica de confianza en Almabrands.

Esta pérdida de impulso en la evolución de la confianza es bastante general y obedece a un escenario de alta inestabilidad económica y política. En efecto, la confianza general, considerando todas las categorías, se encuentra estancada entre las notas 4,2 y 4,3 (en una escala de 1 a 7), desde 2022, aunque la mirada positiva es que su evolución fue siempre creciente desde 2015.

“Sin duda, estamos muy lejos de un desempeño de excelencia. La confianza de los chilenos cae, impactada por un crecimiento moderado y alto costo de la vida, así como expectativas de mejora retrasadas, escenario de incertidumbre y polarización política”, agrega Pamela Ordenes.

El estudio realizado entre el 25 de agosto y 2 de septiembre de este año, consistió en una encuesta vía online a más de 2.800 personas, de 18 a 70 años de todo el país, midiendo 316 marcas en 40 categorías, considerando empresas, medios de comunicación, fundaciones e instituciones sin fines de lucro, instituciones públicas, poderes del Estado y FF.AA. 

Homologando nuestro indicador con el Trust Barometer de Edelman, Chile se ubicaría junto a Argentina, Francia e Irlanda con un porcentaje promedio de confianza de 48%, una décima por sobre Estados Unidos, aunque lejos de países como China, India y algunos del Sudeste Asiático.

La sorpresa del mundo corporativo

Por el contrario, resulta llamativo el alza que experimentan las marcas corporativas de grupos empresariales, con un aumento de 15 puntos netos. “El despliegue y visibilidad que alcanzan hoy los grandes grupos empresariales, seguramente guiado bajo un claro propósito, ha ido reforzando el vínculo y la confianza de las personas: son referentes en innovación y sostenibilidad, llegan a donde otros no llegan y están presentes en momentos clave aportando al país”, dicen en Almabrands.

Las razones son varias, expresa la especialista. Las marcas -dice-, están más abiertas hacia el mundo externo, conectadas con las comunidades y su entorno, aportando desde el core de sus negocios. En este sentido, “la comunicación juega un rol clave en la construcción de confianza, y la coherencia y honestidad en los mensajes refuerzan la percepción de integridad de las marcas”.

Desde fundaciones al mundo político y poderes del Estado

Respecto a las categorías agrupadas, el estudio de Almabrands indica que son las fundaciones e instituciones sin fines de lucro las que registran la caída más pronunciada en sus niveles de confianza, aunque al partir de una base más alta, siguen siendo de las instituciones a la que los chilenos le tienen mayor confianza. Esta categoría, junto a sectores puntuales de empresas privadas -Tecnología, Mejoramiento y Diseño del hogar y Deportiva-, son las únicas que tienen nota 5 o más. 

Por el contrario, Isapres (nota 3,3), AFPs (3,2), figuras políticas (2,9) y poderes del Estado (2,5) son las categorías peor evaluadas en sus niveles de confianza. 

En efecto, a menos de un mes de las elecciones presidenciales y parlamentarias, ninguno de los 3 candidatos con más posibilidades de llegar a la presidencia (Jara, Kast y Matthei) se percibe más confiable que el otro, comparten la misma nota 3,2, muy por debajo del total ICREO, aunque superior al resto de los candidatos, alcaldes, actuales ministros y parlamentarios. Solo Michelle Bachelet tiene una nota mejor (3,5), mientras que el actual presidente, Gabriel Boric, llega a un 3,1.

La confianza no es un indicador más: es la base sobre la que se construye el crecimiento de un país. “Cuando las personas confían en sus instituciones, empresas y líderes, se movilizan los proyectos, se fortalece el tejido social y se genera desarrollo sostenible. Chile necesita volver a creer, porque sin confianza no hay progreso posible, y es ahí donde las empresas e instituciones, deben hacerse la pregunta de cómo pueden gestionarla de mejor forma”, se indica en el estudio de Almabrands.

Aquí podrás ver el estudio: https://anda.cl/wp-content/uploads/2025/10/Informe-ICREO-2025-Almabrands.pdf

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