Consejos para marcas que trabajan con influencers: Cómo promover una colaboración ética
De acuerdo a un estudio reciente de la UNESCO, el 62% de los creadores de contenido no verifica la información que comparten.
El uso de influencers en estrategias publicitarias sigue en ascenso, y su impacto en las decisiones de compra de los consumidores es cada vez más evidente. De acuerdo con la encuesta Cadem de marzo de 2025, el 34% de los chilenos ha adquirido o cotizado un producto tras la recomendación de un influencer a raíz de publicidad en redes sociales.
Sin embargo, la credibilidad de los influencers sigue siendo motivo de debate. Un estudio de la UNESCO, publicado en noviembre de 2024, reveló que el 62% de los influencers no verifica la información que comparten, lo que ha generado inquietud sobre la confiabilidad y precisión del contenido que difunden.
Ante este escenario, la directora ejecutiva de CONAR, Maribel Vidal, destacó la importancia de una colaboración ética entre marcas e influencers. “Si bien los influencers tienen un alcance significativo, es fundamental que las marcas trabajen con ellos de manera responsable para garantizar la transparencia y fortalecer la confianza de los consumidores”, señaló.
Para abordar estos desafíos, el Código Chileno de Ética Publicitaria, en su séptima edición vigente desde enero de 2025, establece lineamientos claros para una relación ética con los influencers. “La ética en las campañas con influencers no sólo es un requisito legal, sino también una oportunidad para generar relaciones más sólidas y auténticas con los consumidores, quienes cada vez valoran más la transparencia y la honestidad de las marcas”, agregó Vidal.
Es así, como en el Artículo 36º del Código Chileno de Ética Publicitaria, se detallan los aspectos clave que las marcas deben considerar al colaborar con influencers, a continuación, destacamos algunos:
1. Claridad en la relación comercial
Es fundamental que tanto la marca como el influencer indiquen que la publicación es parte de una colaboración comercial, es decir, el contenido patrocinado debe ser transparentemente identificado como tal. Ya sea a través de un hashtag o mediante una mención explícita en la publicación, la marca y el creador de contenido deben asegurarse de que el consumidor sepa que se trata de una campaña publicitaria.
2. Veracidad y transparencia en los mensajes
Los influencers deben compartir información precisa y verídica sobre el producto o servicio que están promoviendo. Las marcas deben asegurarse de que el contenido compartido sea fiel a las características y beneficios del producto, evitando cualquier tipo de exageración que pueda resultar en una publicidad engañosa.
3. Respeto por la audiencia
Es importante que los influencers mantengan el respeto por sus audiencias y no utilicen su influencia para promover productos o servicios que no son adecuados o que puedan generar confusión o malestar. Esto incluye evitar el uso de un lenguaje que pueda resultar ofensivo o inadecuado para determinados grupos de consumidores.
4. Ética en el contenido visual y audiovisual
Cuando los influencers utilicen imágenes o videos en sus publicaciones, estos deben cumplir con estándares éticos. Los influenciadores no deben alterar o manipular de forma engañosa las imágenes para hacer que el producto se vea de una manera que no sea realista. La autenticidad es clave para mantener la confianza con la audiencia.
5. Cumplimiento de las normativas legales
Los influenciadores, al igual que las marcas, deben cumplir con todas las normativas legales y éticas, no sólo con el Código Chileno de Ética Publicitaria, sino también con otras regulaciones vigentes sobre publicidad digital y protección de datos personales. La correcta divulgación de la colaboración y la protección de la privacidad del consumidor son aspectos fundamentales en este sentido.
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